domingo, 17 de mayo de 2015

Quinto entrenamiento 2015

Los días 23, 24, 25 y 26 de Abril nos desplazamos al pequeño embalse y no por eso peor, el cual se llama Valdabra, fuimos un grupo de la sociedad Ebropescadores.


Llegamos el día de San Jorge con un buen día y muchas ganas de ver la cara de esas bonitas carpas empezamos a montar todo con toda la ilusión que se lleva.
Se comenzó el cebado de puesto y el montaje de cañas y seguidamente el montaje de biwys.



Una vez terminado ya solo quedaba esperar que sonaran las alarmas las cuales se hacían duras de oír, mientras el pequeño benjamín de la sociedad nos amenizaba el día con sus idas y venidas por todos los puestos, a ver si salían esas caras que a el tampoco le picaban.


Por fin llego la noche que todos esperábamos a ver si las picadas surgían y bueno, no fue para el gusto de todos, pero alguna ya empezaba a dar la cara.


Y Aparicio con su carpa de 4,500 kg


El segundo día transcurría sin picadas pero bueno la esperanza es lo último que se pierde pero no querían dar la cara seguíamos cebando cambiando cebos pero seguían duras de picar. Se veía fea la cosa pero sin perder la ilusión ni el humor, pero el amigo Javier Ostariz nos amenizaba con su baile del caballito de palo.


Llegaba la segunda noche y todos con la misma ilusión pero seguían igual, hubo compañeros que tuvieron la gran suerte de verles la cara.




El tercer día seguíamos muchos con nuestro bolo y al día siguiente amenazaban lluvias fuertes y la verdad que aunque vinieron más compañeros íbamos perdiendo la esperanza de ver esas carpas y los compañeros decidieron marchar por las aguas y la verdad que tres días a bolo nos pesaba a todos. Al final decidimos quedarnos 3 aun sabiendo que el tiempo no era favorable y las carpas tampoco querían que las viéramos.


Ya caía la tarde y por fin suena mi alarma la cual me daba ilusión de verlas pero no fue así, se escapo. Pero sin dejar pasar mucho tiempo empezaron a sonar las alarmas y empezó la fiesta tanto yo como los compañeros empezamos a sacar esas carpas tan bonitas que esconde este pantano.




La noche transcurría sin parar de picar y salían esas royales que uno sueña pescar algún día como esta que peso 4,500 kg.


La noche estaba dando el fruto de tanta espera y ahí salía esta estupenda carpa royal la cual me dio el honor de hacer esta crónica con sus 5,100 kg.


Y ya se iba haciendo de día y iban saliendo las ultimas carpas de esta sesión que ya prometía agua y los tres últimos que quedábamos ya recogimos y dimos por finalizada la sesión que nos dio buenos ratos y mucha espera a todos los participantes y compañero de Ebropescadores.


Y sin más me despido hasta el próximo encuentro que nos volveremos a juntar la maravillosa familia de Ebropescadores.

Un saludo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario